Érase una vez una realizadora zaragozana, Pilar Palomero, decidida a dar el salto de los cortos y mediometrajes a un largo que recogiera algunas de sus vivencias de juventud.
La película ‘Las Niñas’, rodada este verano en Zaragoza y Lleida, es una historia de ganas, paciencia y perseverancia. De cabezonería aragonesa y trabajo de años de su creadora, Pilar Palomero, que retrata en su primer largometraje a toda una generación de mujeres, a quienes éramos niñas y jóvenes en los años 90, en la España de la Expo de Sevilla y los Juegos Olímpicos de Barcelona, en 1992.
Con Andrea Fandos como Celia y la doblemente goyesca Natalia de Molina como Adela, su madre, la cinta narra el paso a la pubertad de Celia y sus amigas, su día a día en un colegio de monjas, en un hogar en el que no ha conocido a su padre y su madre aparece como una figura sobreprotectora y, en ocasiones, asfixiante. Andrea, maña, no nos das nada de envidia, vaya panorama que le hace vivir a tu personaje Pilar en esta peli.
Andrea FandosNatalia de MolinaPilar Palomero, Andrea Fandos y Natalia de Molina
“No es una película autobiográfica, pero parte de mis vivencias están en la historia”, reconoce Pilar Palomero. Tras muchos cortos, el paso a un largo ha sido “un proceso casi natural”, pero también “un trabajo de años”, afirma contenta con el resultado.
Pila Palomero, directora de «Las niñas»
Este mes de agosto, el IES Miguel Servet de Zaragoza ha sido escenario del rodaje y ha acogido a un equipo de unas 30 o 40 personas. La realizadora tenía claro que la capital aragonesa era un must en esta cinta: es su ciudad natal, donde vivió su adolescencia y, qué os vamos a decir nosotras, una ciudad de cine que debería potenciarse aún más.
La cinta se estrenará en 2020 y, mientras esperamos a que llegue a las salas, os vamos a desvelar algunos secretos. Natalia de Molina, de la que nos declaramos fans absolutas, es una madre luchadora, algo conservadora y estricta y vive algunos momentos de especial intensidad con Celia en las escenas grabadas en Zaragoza, ciudad que ha visitado por primera vez gracias a este rodaje.
Ninguna de las niñas se había leído el guión y ha habido mucho trabajo “desde la improvisación, desde la verdad y lo que surge en el momento”, explica la actriz. El colegio es el universo de Celia fuera de su casa, como lo ha sido en nuestras vidas. Todos recordamos aquella época de días felices y algún rato tonto que nos ha curtido el carácter y nos ha hecho crecer.
Por su parte, Celia es una niña muy tímida, pero muy abierta con sus amigas. Andrea Fandos considera “una experiencia increíble” trabajar con Natalia de Molina y admite que le encanta actuar e interpretar a distintos personajes. Seguro que pronto la veremos en nuevos proyectos cinematográficos porque estas niñas vienen, como en la archiconocida canción de Alejandro Sanz, pisando fuerte.
«Las niñas» leyendo la Super Pop en una escena de la película
La película cuenta con un presupuesto de un millón doscientos mil euros y producen Valérie Delpierre por parte de Inicia Films, después de su éxito «Verano 1993», y Alex Lafuente de Bteam Prods, productor de«La Novia» y de la ganadora de la Concha de Oro en el pasado Festival de San Sebastián, «Entre Dos Aguas». Niñas, ¡os esperamos en las salas!
“El cine tiene que ser dos cosas: primero, que no sea aburrido y segundo, que sea divertido”. Esta frase del Simón de Honor 2021, el cineasta Pedro Aguaviva, encarna a la perfección al mundo del audiovisual y la décima gala de los premios Simón, que la Academia del Cine Aragonés celebró el sábado, 26 de junio, en la localidad turolense de Andorra.
El premio Simón en manos de uno de los premiados de la noche. ¿Quién será?… Foto: Josian Pastor
Pero, ¿cómo podríamos describir mejor lo que ocurrió antes y durante la ceremonia? El encargado de hacerlo, en su intervención en la gala, fue el propio alcalde de Andorra, Antonio Amador, quien poco antes de entregar el galardón a la mejor película aragonesa del año aseguró que el cine había hecho todo un homenaje al pueblo ese día al ofrecerle una muestra “de todos los géneros posibles”.
Sábado 26 de junio. Lugar previsto de celebración de la gala: exteriores de la Ermita de San Macario. Comienza a llover, y con ganas además. La previsión es que pare, pero aquello arrecia y convierte “la típica película de ilusión, familiar, de qué chulo ha quedado” todo el escenario de la gala montado, en un “thriller, pero de los chungos”. Seguía lloviendo y la cosa adquiría tintes de drama, pero la Academia no iba a dejar que cuatro gotas, rayos, truenos y algo de barro arruinaran la fiesta del cine aragonés.
Así que lo que habían preparado durante meses para su desarrollo en la ermita, se organizó de nuevo en unas horas en la Casa de Cultura, un espacio de dimensiones mucho más reducidas, pero que permitió ese final feliz que tanto nos gusta en las pelis. “No ha sido en el sitio que se pensaba, pero ha quedado apañadico”, subrayó el alcalde, y tenemos que darle la razón, porque en un tiempo récord se levantó una gala igualmente emotiva y espectacular.
Al ritmo del agente 007 salió al escenario el presidente de la ACA, Jesús Marco, quien aseguró que jamás olvidará a San Macario y la animada tarde que les había dado. Reivindicó la labor de la Academia en Aragón y pidió a las instituciones que crean en estos profesionales, para dar paso a la embajadora de los Simón 2021, la actriz Miriam Díaz Aroca, que llegó bailando y haciendo bailar al presi.
Miriam Díaz Aroca, divertidísima durante toda la gala, se parte la caja con estos premios aragoneses. Foto Josian Pastor
VALIENTES
“Somos una raza de valientes, gente resolutiva, siempre con alegría”, manifestó la artista sobre los profesionales del sector, defendiendo que el mejor premio “es seguir trabajando y que seamos visibles a pesar de la edad”. “Los cincuenter y sesenter tenemos un potencial maravilloso que dar en el cine; los veteranos tenemos tanto que decir y una vivencia inmensa para dar vida a personajes maravillosos”, remarcó. Elogió también la capacidad de la Academia aragonesa para reorganizar la ceremonia, observando que “si esto pasa en Hollywood o en los Goya, aplazan la gala”, y abandonó el escenario de nuevo bailando, reconociendo estar “feliz” por ser embajadora del evento y por representar “una profesión que es maravillosa, a pesar de la incertidumbre».
La presentado, Ana Roche, animó la gala con sus intervenciones entre premio y premio, con guion de Roberto Malo y Daniel Tejero. Foto Josian Pastor
Entre los momentazos de la gala, además de la gran labor de la presentadora, la actriz Ana Roche, hubo apariciones estelares, como las de las actrices María José Moreno y Luisa Gavasa, divertidísimas sobre el escenario. Ambas recordaron a quienes no habían podido asistir al evento por los cambios de última hora causados por el tiempo, y que obligaron a reducir aforos, y felicitaron a la ACA por su capacidad de respuesta. Presentaron el premio a mejor dirección y aprovecharon la ocasión para bromear porque “¿qué pasa si no entiendes al director, si no sabes lo que te quiere decir o eres un error de casting?”, planteó entre risas María José Moreno.
La actriz María José Moreno atendiendo la charrada de su compi Luisa Gavasa.Foto Josian Pastor
Igual de enérgico y eufórico se mostró el actor y productor Jaime García Machín, que recogió el premio a mejor cortometraje para ‘En racha’, de Ignacio Estaregui, y el de mejor actor, para su compañero Saúl Blasco, por este mismo trabajo. Muy emocionada logró Andrea Fandos su Simón a mejor actriz por ‘Las niñas’, dedicando el premio a la directora Pilar Palomero, a sus compañeras de reparto y a su familia; mismas sensaciones que tuvo Germán Roda, director de ‘Marcelino, el mejor payaso del mundo’, docu con el que ganó tres galardones que quiso dedicar al productor, y su amigo, Jaime Fontán, recientemente fallecido, y a su hermana y compañera de oficio, Patricia.
Nosotras le daríamos el premio a mejor discurso a la actriz polifacética Ana Esteban, voz en off de la gala y que se marcó un speech digno de Pedro Almodóvar en los Oscars al recoger su Simón a mejor dirección de producción por ‘La mujer que soñaba con números’, de Mirella R. Abrisqueta. Ana, emocionada, ¡no se dejó a nadie en los agradecimientos! Y mención especial, también, para el equipo del corto ‘Souvenir’, animando la gala con sus vítores y su alegría.
Ana Esteban, ganadora de la mejor dirección de producción, viniéndose muy arriba con el Simón en la mano. ¡Viva el rock and roll! Foto Josian Pastor
‘LAS NIÑAS’ Y SUS SIMONES
‘Las niñas’ fueron las grandes triunfadoras de la noche, con seis ‘Simones’ y su directora, Pilar Palomero, no dejó pasar la oportunidad de agradecer a sus padres el apoyo que siempre le han dado en “esta aventura de hacer cine”. “Mi padre es ingeniero agrónomo, mi madre venía de la física, profesora de matemáticas, y el cine me quedaba muy lejos”, pero en su camino se cruzó también el cineasta Bigas Luna, “por quien seguramente terminé haciendo cine y que nos inició y marcó (con el taller que el director impartía) a muchos de los que estamos aquí”, indicó.
Afirmó sentirse “muy feliz” de haber podido crear una película en Aragón, en Zaragoza, con la mayor parte del equipo de esta tierra y mencionó a todo el equipo y las personas que ayudaron en el rodaje.
La productora, Valérie Delpierre (Inicia Films), que la acompañó para recoger el galardón a mejor película, recordó también al productor de Aragón TV, Jaime Fontán, y el apoyo que prestaron a este proyecto instituciones como la Film Commission o el Ayuntamiento de Zaragoza, “que nos abrió las puertas y las calles”, los zaragozanos y las personas que se presentaron al casting. “Encontramos perlas, pero hay una cantera de actores y actrices maravillosos en Aragón”, dijo.
Valérie Delpierre y Pilar Palomero, recogiendo el Simón a mejor largometraje por ‘Las niñas’. ¡Ya han perdido la cuenta de los premios que llevan!Foto Josian Pastor
Los tambores de los nueve pueblos que conforman la Ruta del Tambor y el Bombo del Bajo Aragón resonaron en la sala para recordar en el homenaje in memoriam al compositor Antón García Abril y al productor Jaime Fontán, fallecidos este año.
Y en esta gala, llena de emociones, el Simón de Honor 2021, Pedro Aguaviva, expresó su agradecimiento a la Academia a través de un videomensaje en el que manifestó que recibir este reconocimiento es “una de las cosas más estimulantes que me pueden suceder en la vida”. El cine es un trabajo que apasiona, “nuestra vida es un arrebato creador y eso no tiene precio”, indicó, asegurando: “yo no me retiraré de la vida nunca, aquí hemos venido a hacer cosas y hay que morir con las botas puestas”.
La Ruta del Tambor y el Bombo del Bajo Aragón hizo aparición al final de la gala, emocionando al público con sus golpes y resonando en Andorra entera. Foto Josian Pastor
PALMARÉS
La décima edición de los Simón fue una gala de matrícula de honor, de lucha contra los elementos para celebrar un año más con el sector el momento que vive el cine aragonés. Y, como en todas las ceremonias de premios, aquí vamos con el palmarés de 2021:
‘Las niñas’de Pilar Palomero – Seis premios ⭐⭐⭐⭐⭐⭐
Mejor Largometraje Mejor Dirección a Pilar Palomero Mejor Actriz a Andrea Fandos Mejor Guion a Pilar Palomero Mejor Banda Sonora Original a Carlos Naya Mejor Vestuario a Arantxa Ezquerro
¿Os habéis preguntado alguna vez qué sería del cine, la televisión o el teatro sin el vestuario que caracteriza a los personajes o las canciones que nos cuentan sus historias? Imaginemos la oscarizada Titanic sin ‘My heart will go on’, y dediquemos otro momento a pensar que Jack sí que cabía en esa tabla y que Rose igual se pasó un poco no dejándolo subir. O, en esta misma cinta, que los personajes no vistieran con trajes de la época y los hubiéramos visto en su viaje en el transatlántico con las mismas galas que utilizamos nosotros para bajar a la playa o la piscina en verano. No sería lo mismo, ¿verdad?
Seguramente sin el trabajo de los responsables de vestuario, con Deborah Lynn a la cabeza, y de los autores de la canción original, James Horner y Will Jennings, nuestro corazón no seguiría latiendo al ver el taquillazo de James Cameron. Porque los detalles importan y son elemento fundamental para captar nuestra atención y meternos en la piel de los personajes y en su historia.
Carlos Naya explicando a ‘Las Niñas’ que la canción original no será al ritmo de Chimo Bayo. Celia (Andrea Fandos) memoriza la letra enseguida, mientras el coach Rubén Martínez analiza cómo sumarse al coro en esa escena. (Foto: Carlos Naya)
Por ello, nos hemos conmovido al escuchar la canción‘Lunas de papel’, de Carlos Naya, en la película ‘Las Niñas’, de Pilar Palomero, y nos hemos metido de lleno en la historia y en nuestros recuerdos gracias al trabajo en vestuario de Arantxa Ezquerro. Ambos nos ayudan a viajar a los 90 y a sentir, de nuevo, cómo es el paso que todos hacemos de nuestra niñez a la juventud, un trabajo que les ha valido a ambos la nominación en sus respectivas categorías en la próxima edición de los premios Goya, que tendrá lugar el próximo 6 de marzo.
Una gala en la que ‘Las Niñas’ tendrá la oportunidad de arrasar en nueve categorías: mejor película; dirección novel y guión original, con la zaragozana Pilar Palomero; mejor actriz de reparto, con Natalia de Molina; dirección de fotografía, con Daniela Cajías; montaje, con Sonia Escudé; dirección artística, con Mónica Bernuy; y en canción original y diseño de vestuario, con los aragoneses Carlos Naya y Arantxa Ezquerro con quienes hemos hecho ‘match’ para conocer mejor sus trabajos.
UN CHISPAZO
Arantxa Ezquerro se incorporó a ‘Las Niñas’ gracias a la recomendación de uno de los productores de BTeam Pictures y por el boca oído que llevó su nombre hasta Pilar Palomero. “Nos pusieron en contacto, tomamos un primer café en Zaragoza y el chispazo fue al momento”, recuerda Arantxa. Amor a primera vista acompañado por las risas que ambas se echaron recordando cómo fueron sus (y nuestros) 90, ya sabéis: hombreras, cinturones con margaritas y corazones en la hebilla, todo bien de colorinchi… A esta primera cita tan prometedora le siguió la lectura del guión y “me atrapó, porque hay una parte de mí en ese proyecto, cuenta cosas que he vivido”, asegura a Secuenciadas.
Arantxa Ezquerro y Pilar Palomero en un momento del rodaje, comprobando cómo quedan en cámara los uniformes del cole de monjas. (Foto: Jorge Fuembuena)
De este modo quedó enganchada por la historia, pero había que ir a lo concreto, ver cómo era la gente en 1992 y tener en cuenta que la peli presentaba un colegio de monjas, con las alumnas con uniforme, lo que a priori podría parecer que simplificaba la labor de vestuario, pero no, amigos.
“Es un reto porque para demostrar la personalidad de cada niña solo tenía complementos o la peluquería y la paleta de colores”, aunque Pilar y la directora de fotografía “tenían muy claras algunas cosas” y fueron completando esas ideas investigando con fotografías de sus familias y amigos en aquella época y con documentales de TVE. “Fue divertido y escandaloso, porque te das cuenta de que te has hecho mayor y te acuerdas perfectamente de ese año, de las olimpiadas, de tus amigas, del verano y las fiestas”, relata, señalando que tiene recuerdos maravillosos, siendo “muy feliz”.
La forma de vestir no era la misma entonces en Zaragoza que en San Sebastián o en un pueblo de La Rioja, aunque ahora en este mundo globalizado no nos demos cuenta. Así que fueron seleccionando vestuarios y probando cosas, algunas funcionaron en cámara y otras no: “en pruebas de cámara vimos que el tamaño de las perlas que llevaban las niñas cogía mucho protagonismo y brillaban mucho”, afirma.
Ven conmigo, Mary, que te voy a dejar look 90 casual. Arantxa trabajando concentrada con los complementos. (Foto: Jorge Fuembuena)
FASCINACIÓN EN ESTAMPADOS Y A COLOR
Los 90 fueron una época de estampados y mezcla de colores, aunque Arantxa, con espíritu deportista, vestía mucha ropa deportiva y se quedaba alucinada cuando veía a su vecina ultragótica o a la ultrapija. Esa fascinación por el vestuario le llevó a querer estudiar moda, pero su madre se negó. De este modo, se decantó por el cine y el audiovisual y en cada proyecto de clase se dedicaba con pasión a la parte artística, dando paso a una carrera que le llevó a trabajar en producción, realización y, cuando le salió la oportunidad, a diseño de vestuario, una labor en la que trabaja con un equipo integrado por otras tres personas.
Oye, ¿pero en qué consiste este trabajo? Arantxa nos lo explica: “lo primero es conocer lo que quiere el director; lo segundo, la documentación es fundamental para saber qué vas a contar”. Ella trabaja con paneles de referencia, nos la imaginamos en plan Grissom con la pizarra investigando un asesinato, pero en realidad son fotografías de la época que tenga que recrear y, luego, crea los figurines, los dibujos concretos de los personajes vestidos. Después solo queda lograr lo que se ha propuesto y, para ello, pelearse con el presupuesto, que suele ser ajustado, y las tallas para materializarlo. En ‘Las Niñas’ hay vestuario de segunda mano, cedido por el proyecto Arropados de Cáritas, otra parte de alquiler y mucho de cosecha propia.
No penséis que una vez que se consigue todo eso es coser y cantar. “La última semana de preparación se hacen las pruebas de figuración y en cámara”. Arantxa es meticulosa e hizo desfilar a toda la figuración para probar sus trajes, pero ella y la responsable de peluquería, Carmen Arbués, crearon tan buen rollo que todos acabaron encantados. No obstante, todo el proceso es “como una yincana” con el tiempo y el presupuesto como principales obstáculos a sortear, pero no los únicos.
Figurines creados por Arantxa Ezquerro para ‘Las Niñas’. ¡Los queremos todos en formato postal!
Recordamos que las perlas quedaban demasiado vistosas en pantalla, pero a tres días de comenzar a rodar se dieron cuenta de que las camisas de los uniformes de las niñas hacían demasiado ruido con el movimiento y se notaba en el audio. “Tuvimos que buscar corriendo otras camisas para ver si sonaban o no, como locas por el Corte Inglés mirando camisas”, afirma entre risas, agregando que, además, como en la peli no hay blancos puros, sino colores rotos, después de comprarlas había que teñirlas y las horas escaseaban. Pero esto “no son dificultades, son cosas de la vida”.
Y cuando acaba el rodaje, ¿qué pasa con el vestuario? Pues la mayor parte de las veces se lo queda la productora o, si es alquilado, se devuelve; también algunas piezas se usan como recuerdo para los actores; otros protagonistas piden por contrato poder quedarse con algo; pueden destinarse a regalos o subastarlo en mercadillos para recuperar algún fondo.
LUNAS DE PAPEL
Como decíamos al principio al ritmo de Celine Dion, la canción original es otro elemento esencial para cualquier proyecto audiovisual. En ‘Las Niñas’ la firma el profesor de sonido Carlos Naya, quien acompaña a Celia, la protagonista, en su principal momento emocional con el tema ‘Lunas de papel’.
Este apasionado por la música, también realizador, mantiene amistad con Pilar Palomero desde sus años mozos, mucho antes de dedicarse al audiovisual. “Siempre compartimos proyectos que tenemos en mente, guiones, ideas, y ‘Las Niñas’ lo he seguido desde casi el comienzo, desde las primeras versiones de guión en 2017”, relata a Secuenciadas. El cambio del terreno de la amistad al profesional se produjo cuando una amiga en común le hizo llegar a Pilar Palomero una canción compuesta por Carlos. “La escuchó, algo le hizo click y me llamó para pedirme la canción de la peli. Como ya sabía a qué momento se refería, le dije que sí”, detalla.
Carlos Naya en el estudio, durante la grabación con el coro Amici Musicae, alucinando al escuchar ‘Lunas de papel’
En un primer encuentro acordaron cómo sería la canción o, más bien, cómo no sería: nada de un tema religioso, aunque el contexto fuera un colegio de monjas; ni nada naif; un piano, un coro, algo sencillo, que fuera hermoso y bonito, que transmitiera la carga emocional del personaje. ¡Pues no pides nada, Pilar! “Desde ese punto me puse a componer y fue bastante rápido, las ideas gustaron y fue fluida la cosa”, manifiesta.
Respecto al título y la letra de la canción, ‘Lunas de papel’, utiliza conceptos que se contraponen entre sí, porque la propia película está llena de esos contrastes, ya que el personaje de Celia se mueve entre la niñez y la adolescencia, vemos la vulnerabilidad y el empoderamiento en su madre, preocupación y esperanza en cómo Celia contempla su situación familiar. “Intenté evocar estos contrastes, la esperanza, el paraíso perdido de la infancia”, algunas veces desde el subconsciente y los recuerdos de su propia infancia, cuando era niño y pasaba a jugar con unas vecinas que cuidaban de Carlos y su hermano Ignacio.
“Una se llamaba Chelo y en su cuarto tenía pegatinas de lunas y estrellas en el techo, fosforescentes, y al apagar la luz se veía una noche estrellada”, algo de esa dulzura se transmite en el tema principal de la película, pero sin que la letra tenga que ser explícita, sino evocativa, ya que su objetivo era crear ese contexto para la imagen en la que vemos a Celia, su cara, su mirada y el cambio que se produce en ella. “Tenía que acompañar y emocionalmente potenciar ese momento”. Las voces corresponden al coro zaragozano Amici Musicae, dirigido por Isabel Soriano, y al piano está el propio Carlos Naya que con ‘Las Niñas’ está viviendo “un sueño por formar parte del equipo humano que ha hecho está película. Es un orgullo, un episodio de mi vida que voy a recordar con mucho cariño”.
Carlos le cuenta a Isabel Soriano aquella vez en la que subió al Moncayo y cantó ‘To the moon and back’ bajo las estrellas.
PACO, VEN A CASA
Por sus espléndidos trabajos ambos han sido nominados a los premios Goya. Arantxa se enteró de su nominación a través de un mensaje de WhatsApp de una compañera y asegura que le dio “vértigo”, pero sobre todo “una alegría brutal” y desde ese momento ha recibido innumerables muestras de cariño.
Las mismas que están llegando a Carlos Naya, quien también está nominado a los Gaudí y que el día en que se anunciaron los candidatos a los Goya tenía que trabajar cuatro horas seguidas dando clase y, cuando su móvil comenzó a vibrar como un loco decidió ponerlo en modo avión para verlo en su descanso. “Justo un poco antes un alumno que estaba metido en redes me dijo que me habían nominado y fue un momento muy bonito porque la clase se puso a aplaudir”, asegura. Solo de pensarlo nosotras ya nos emocionamos, Carlos. A este momento le siguió “un torbellino mediático, una locura que vives con mucha alegría, con felicidad, gratitud y con un sentimiento de deuda, de alguna forma”.
Ambos vivirán una edición de los Goya especial y pandémica, ya que la gala será online y conectarán con nominados y ganadores. Como queremos que vengan cuantos más Goyas mejor, deseamos que el equipo al completo tenga que pasar por la sede de la Academia a recoger sus cabezones. Antes, la noche del 6 de marzo, los nominados de la película podrían seguir la ceremonia reunidos en un hotel de Barcelona, si bien cumpliendo los aforos, las distancias y con la mascarilla incluida.
Tanto Carlos como Arantxa elogian el talento y la capacidad de trabajo de Pilar Palomero. “Siempre he tenido fe absoluta en ella, pero aún así esto ha sido una locura, porque es una película tan nominada, tan vista y tan valorada”, afirma Carlos Naya, haciendo suyas las palabras de la propia Pilar: “ni en mis mejores sueños pensaba que esto podría pasar”.
¡ENHORABUENA EQUIPO! Deseamos que los Goya se vengan con vosotros a Aragón. Carlos apoya esta idea.
CARLOS NAYA Y ARANTXA EZQUERRO
Carlos Naya lleva en la música toda su vida y actualmente trabaja de profesor de planificación de proyectos de sonido en CPA Salduie. En este sentido, cree que la nominación no cambiará su vida laboral, sino que le supone “una motivación para hacer muchas cosas que tengo en mente, proyectos creativos audiovisuales y musicales”.
Ahora, de hecho, se encuentra en fase de premontaje del documental ‘Isolée’, que dirige y promueve junto a su hermano Ignacio y que dedican a la figura de José María Javierre, francoespañol pero jacetano de nacimiento, el primer ciclista español que corrió el Tour de Francia, en 1909, cuando ese tipo de carreras era una aventura “casi épica”. En este trabajo reivindican su figura, desconocida, contactando con sus familiares y expertos en ciclismo.
Por su parte, Aranxta Ezquerro, también nominada a los Gaudí y que posee dos premios Simón del Cine Aragonés, ha trabajado con buena parte de los cineastas aragoneses más reconocidos, como Miguel Ángel Lamata, que “con 24 años me ofreció hacer el vestuario de su película, le dije que no estaba preparada y me dijo que o lo hacía o no hacía nada en su peli; me dio el gran empujón” en su carrera. Ha pasado también por ‘De tu ventana a la mía’ y ‘La novia’, ambas de Paula Ortiz, y en la que se tuvo que pelear en esta última con nuestro querido cierzo.
Ha participado también en los proyectos ‘Dantza’, de Telmo Esnal; ‘Tensión sexual no resuelta’ y ‘Nuestros amantes’, de Lamata; ha trabajado en teatro, montajes de óperas clásicas, y en televisión, en la serie para Movistar ‘Justo antes de Cristo’, una comedia ambientada en Roma y que dirige Pepón Montero, Borja Cobeaga y Nacho Vigalondo.
Lunes, no. Martes… NO. Miércoles, ¡NO! Jueves, viernes… ¡HOY ES VIERNES! Si has leído esta frase cantando la canción de Niños del Brasil estamos seguras de que te va a molar cantidubi el estreno que llega este mismo viernes a la cartelera cinematográfica: ‘Las niñas’, ópera prima de la directora zaragozana Pilar Palomero. Vas a vivir un viaje en el tiempo y los recuerdos de toda una generación, acompañado por temazos de los 90 –Niños del Brasil, Héroes, Más Birras y HU-HA Chimo Bayo– que te harán mover el esqueleto en las butacas mientras conoces a Celia y sus amigas. ¡Alucina, vecina!
Reciente ganadora de la Biznaga de Oro a Mejor Película Española en el Festival de Málaga, ‘Las niñas’ se rodó en el verano de 2019 en escenarios de Zaragoza y Lleida y propone conocer a un grupo de amigas que estudian en un colegio de monjas de la capital aragonesa, en el año 92. La cinta relata ese paso a la adolescencia de las jóvenes, sus relaciones, su día a día en el colegio y en sus casas, con sus familias y sus circunstancias.
Andrea Fandos, en el papel de Celia, y la doblemente goyesca Natalia de Molina como Adela, su madre, lideran un reparto en el que también encontramos a Zoe Arnao como Brisa, la nueva compañera que llega al cole desde Barcelona y que aportará nuevos puntos de vista a la vida de las jóvenes; Julia Sierra como Cristina, divertida y defensora de sus amigas; Elisa Martínez interpretando a Leire, una chica bien algo traviesa; Carlota Gurpegui como Vanesa, la protectora del grupo; Ainara Nieto como Clara, en un papel de compi maligna; Francesca Piñón como madre Consuelo y a Laura Gómez-Lacueva, maravillosa y de la que solo os adelantamos que si hubiera sido profesora echaría unas broncas épicas.
Brisa (Zoe Arnao) aburrida en clase, pensando en llegar a casa y comerse un bocadillo de nocilla. Foto de Jorge Fuembuena.
Detrás de las cámaras están Inicia Films y BTeam Pictures en la producción; Daniela Cajías como ya premiada directora de Fotografía en el festival malagueño; Arantxa Ezquerro y Carmen Arbues en vestuario y peluquería; Amanda Villavieja como jefa de sonido y Mónica Bernuy como directora de arte. Gisela Krenn fue la directora de casting y ha dado en el clavo al elegir a este elenco de “niñas” que han trabajado desde la improvisación con la ayuda del también actor y coach Rubén Martínez. Ellas encantadas, claro, porque el rodaje se convirtió en un juego del que ahora todos podemos disfrutar y flipar en colores con el trabajazo que han sacado adelante.
MUY PERSONAL
“Nos lo pasamos muy bien en el rodaje”, recuerda Pilar Palomero, al explicar que se creó muy buen ambiente entre el equipo y las niñas, todos disfrutaron y “fuimos como una niña más”. La película se ha preestrenado esta misma semana en Madrid, Barcelona y Zaragoza, en los Cines Palafox, donde la cineasta reconoció sentirse muy nerviosa antes de la proyección, dio las gracias al equipo técnico y a las instituciones que han apoyado este proyecto y dedicó el trabajo y su estreno en salas a su familia y, especialmente, a sus padres, quienes le animaron a estudiar cine.
La película ‘Las niñas’ “tiene que ver mucho con mis recuerdos, no va contra nadie, es muy personal”, señala Palomero, para afirmar que, durante su rodaje, no podía imaginar el éxito que está teniendo, ya con varios premios en Málaga y su presentación en la Berlinale. “Mi prioridad era hacer la película, estar centrada en eso y dar todo de mí para que saliera lo mejor posible, pero es una maravilla encontrarme en esta situación”, reconoce a Secuenciadas.
Pilar Palomero queriéndole quitar el puesto a Daniela Cajías de DOP en un momento del rodaje de ‘Las niñas’.
Así, llegó a Málaga feliz porque presentar la cinta allí después del confinamiento y la pandemia era “una alegría enorme” a la que se ha sumado recibir la Biznaga de Oro al mejor largometraje español, que reconoce el trabajo de todo el equipo, algo que “nos ha hecho infinitamente más felices”.
PORTADA DE LA SÚPER POP
Aunque la dire nos lleva a dar un voltio por los 90, ella asegura que no echa nada de menos de aquella época. Pero, ¿nasti de plasti? Pues no, nada, “simplemente los tengo en el recuerdo, son los años de mi infancia y les tengo cariño, pero no hay nada en concreto que eche de menos”.
Y le preguntamos: “¿ni siquiera esos consejos tan sabios de revistas como la Súper Pop? Y Pilar, entre risas, confirma que esos consejos tampoco, porque le parece que “no eran muy de fiar”. La verdad es que de los consejos y aquellos testimonios con historias truculentas pasamos, pero los pósters a doble página y las fotos para las carpetas eran una pasada.
Pilar Palomero y sus niñas riéndose de los absurdos consejos de la Súper Pop para ligarte al chico que te gusta. Foto Jorge Fuembuena.
Con sus niñas ya en el cine desde este viernes, la directora confía en que el público sienta la parte emocional de la película, “el viaje que hace Celia” desde la inocencia hacia la madurez, para reivindicar su propia voz en su mundo. “Empiezo a recibir opiniones de gente y me encanta cuando me explican que les ha llevado a su infancia”, subraya.
PISANDO FUERTE
Y es que estas niñas vienen pisando fuerte, como cantaría Alejandro Sanz. Aunque están viviendo los festivales y estrenos “con muchos nervios”, desbordan alegría y emoción. La prota Andrea Fandos, con orígenes en Bujaraloz, recuerda que pensaba que el rodaje de la película sería más difícil, pero fue una experiencia “divertida, nos ayudaron a meternos en el papel con juegos, nos enseñaban revistas para llevarnos a los años 90”.
Celia (Andrea Fandos) muy atenta a la profe monja en la clase de costura del cole, Clara (Ainara Nieto) ya se sabe el punto de cruz.
De aquella época le ha sorprendido que se estudiara costura en los colegios. Seguro que no es la asignatura preferida de Celia, su personaje, una niña tímida y algo reservada. “Si me pasara algo en la escuela yo se lo diría a mi madre o a mis amigas, en cambio Celia se lo calla y se lo guarda sin que nadie se entere”. Celia es dura de pelar y al conocerla os va a dejar in love. Quedaréis atrapados en su historia en la primera mirada.
Julia Sierra da vida a una de las mejores amigas de Celia, Cris, una chica extrovertida, divertida y que defiende a sus amigas por encima de todo. En su caso, tras adentrarse en los 90 le ha encantado la ropa, los peinados y las discotecas de entonces, mientras que le ha chocado la escasa comunicación madre e hija que se refleja en la película, también “que la sociedad era muy machista, hasta en el colegio te enseñaban cosas machistas”, mientras que ahora “vienen a dar charlas de feminismo”.
Rememora con emoción los días de rodaje, porque “Pilar, Rubén y el equipo nos han dado mucho cariño y ayuda, fue muy divertido y bonito”, una experiencia en la que ha ganado nuevas amigas. Ahora llegan los reconocimientos y, cuando su madre le comunicó el premio de Málaga, “me eché a gritar como una loca, no me lo esperaba, no me imaginaba llegar tan lejos”. Confiesa que no entraba en sus planes participar en una película, aunque ahora le encantaría ser actriz, pero si no se decide por el séptimo arte ella lo tiene claro: será profesora o médica.
AGRADECIDAS Y EMOCIONADAS
Carlota Gurpegui interpreta a Vanesa, una joven responsable y sencilla que cuida como una madre a las pequeñas del grupo. Del verano pasado conserva recuerdos “súper bonitos: risas, emoción”. “Pilar y las niñas son lo mejor que me he llevado de esta experiencia”, manifiesta, resaltando que la llegada de estos primeros reconocimientos la está viviendo “con una emoción increíble”. Entre lágrimas y abrazos con su familia celebró la Biznaga de Oro, ¡ahí es nada!
Andrea Fandos, Pilar Palomero y Carlota Gurpegui viviendo el preestreno en Zaragoza, en los Palafox, que siguen con la decoración de los 90 en sus pasillos.Foto de Secuenciadas.
De los 90 se ha quedado muy loqui con las expresiones que se utilizaban, como mover el esqueleto, con los temas tabú que antes no se trataban y ahora se hablan con normalidad, con el comportamiento de las niñas en el colegio y la rigidez de la educación en un cole de monjas. También al comprobar cómo se presionaba a las mujeres para que siguieran los cánones y tuvieran un comportamiento determinado.
Elisa Martínez es Leire: “mi personaje me gustó mucho porque, aparte de que los personajes tienen mucho de nosotras, ella quiere ser una chica bien, pero también hacer cosas un poco traviesas”. A veces le dan arranques de valentía, quiere ser mayor de lo que es y Elisa reconoce que ha aprendido “un montón” interpretando este papel. De la grabación rememora la buena sintonía que había entre ellas, ese grupo de amigas que ha cruzado la pantalla. “Me llevo cinco mejores amigas”, resalta.
En su caso, le ha resultado chocante el secretismo que existía entre las amigas en aquella época, los temas tabú, que “guardaban mucho dentro de ellas” y el respeto superlativo que tenían a los profesores. La joven ha vivido en ‘Las niñas’ su primera experiencia cinematográfica, “ojalá la primera de muchas”, indica, y está llevando estas semanas con los pies en la tierra, pero “disfrutando un montón”. “Gracias a Pilar estamos aquí, en Málaga, en Berlín, ojalá quienes seáis de esa generación os veáis reflejados y quienes no, aprendáis y disfrutéis”, desea.
La última “niña” con la que pudimos conversar en los Palafox es Ainara Nieto, que da vida a Clara, la malota del grupo. De la grabación “recuerdo jugar un montón con todas, los ensayos y que fue todo muy guay” y ahora está viviendo con el estreno “muchas emociones muy juntas, es una experiencia muy rara”. Lo que más le ha sorprendido de los 90 es la diferencia en la comunicación entre las mujeres o la música, muy distinta a la actual.
Julia Sierra, Elisa Martínez, Ainara Nieto, Andrea Fandos y Carlota Gurpegui, todo glamour en el estreno de la película. Foto de Secuenciadas.
PILAR PALOMERO
Nacida en Zaragoza, Pilar Palomero es licenciada el Filología Hispánica por la Universidad de Zaragoza. En 2002 participó en el Taller Bigas Luna y en 2006 se diplomó en Dirección de Fotografía en la Escuela de Cine de Madrid, graduándose como la segunda mejor estudiante de su promoción. ¡Muy, muy top!
En 2009 dirigió el corto ‘Niño Balcón’, que logró más de 25 premios y 150 selecciones en festivales; en 2011 realizó el corto ‘Chan Chan’, nominado a los Premios Simón de Cine Aragonés en 2013. Ha sido guionista en televisión y cine; ha escrito y co-dirigido los cortos ‘Noç’ (2015) y ‘La noche de todas las cosas’ (2016) y ha liderado el mediometraje ‘Zimsko Sunce’ (2017) y el docu creativo ‘Horta’ (2017). ‘Las niñas’ es su primer largo y ya estamos ansiosas de conocer nuevos proyectos con los que nos sorprenda esta talentosa directora zaragozana.
Hace algo más de un año, aunque después de los últimos tres meses parece un siglo, asistimos a un taller de escritura digital y pensamos que sería buena idea crear un blog o una web dedicada a algo que nos encanta: el audiovisual.
Con el mismo empeño que Paco Martínez Soria en ‘Don erre que erre’, nos propusimos dar a conocer los proyectos que se crean en Aragón y a los profesionales aragoneses que trabajan en la comunidad y más allá de Fraga.
Y ya sabéis el resultado: desde entonces con periodicidad semanal nos acercamos en nuestros reportajes y entrevistas a la actualidad del séptimo arte aragonés, en todos sus formatos, cortos, largos, docus, presentaciones, estrenos, rodajes, festivales. ¡Nos apuntamos a todo y no nos perdemos una!
Nuestros primeros reportajes los dedicamos a dos directores conocidos en el panorama audiovisual aragonés que justo estrenaban sus cortos hace un año: Sergio Montes y Raúl Guíu. El primer nos hizo pasar un rato de miedo con ‘La virgen pálida’, mientras que Guíu nos sacó a la pista de baile con su historia de amor en ‘Fuera de tono’.
Haciendo nuestra la constancia y tesón de nuestros creadores, desde esos primeros reportajes encontramos en nuestras secciones información sobre medio centenar de proyectos y entrevistas a algunos de los protagonistas del sector. Siempre con humor y con amor, porque ambos son esenciales para la vida. Aunque reconocemos que nos encantan por igual dramas y comedias, siempre es mejor si al leer os robamos una sonrisa.
Pero tenemos ganas de más cine, más cortometrajes, más docuficción, de regresar a las salas y a las presentaciones. Aún nos quedan muchas otras historias que contar y esperamos hacerlo a vuestro lado.