Gala Gracia ha rodado su primera película, ‘Lo que queda de ti’, de la que también ha escrito el guion. Una historia inspirada en una experiencia personal de la directora, que transcurre en el bonito Pirineo oscense. Tras el éxito en festivales de sus anteriores cortometrajes, ‘El color de la sed’ (2013) y ‘La pared’ (2021), da el salto al largometraje. «Los cortos me han ayudado muchísimo a estar segura como directora. Esa experiencia te ayuda pero el largo te curte», confiesa la directora oscense.
Laia Manzanares intentando comunicarse con el ganado ovino. Foto de Lander Larrañaga
Lo que cuenta es la historia de Sara, una joven pianista de jazz que trabaja en Nueva York y que tiene que regresar al pueblo a causa de una tragedia familiar. Allí se encuentra con su hermana, mucho más terrenal y que se dedica a la ganadería. Las terceras protagonistas son las ovejas, que son siempre un recurrente en los filmes de Gala Gracia. En sus anteriores trabajos también compartían primeros planos con los actores.
«Yo estoy muy vinculada al mundo de a la ganadería y al entorno rural porque mis padres y mi hermana son veterinarios», explica la directora a Secuenciadas. La dire cree que el campo tiene muchas historias que no se conocen. «Los entornos urbanos creo que se han tratado mucho más en el cine y ahora está habiendo mucho más interés por lo rural. Yo en realidad no lo hago por esa tendencia, sino porque he crecido con esas historias desde pequeña«.
Antes de rodar, para meterse en la piel de los personajes las actrices tuvieron que meterse a fondo en el mundo campestre y concretamente tratar con sus amiguis las ovejas. Laia Manzanares y Ángela Cervantes se arremangaron los jerseys y se pusieron a desbrozar hierbas, a usar una motosierra, a ver parir una oveja … vamos el día a día del medio rural. «Vinieron a mi granja en Quicena (Huesca) y practicaron el mundo ganadero con mi hermana y mi cuñado. Todo lo que se ve en la película, ellas lo habían practicado con ellos», detalla Gala Gracia.
Ángela Cervantes y Laia Manzanares escuchando una jota aragonesa. Foto de Lander Larrañaga.
También aparecen en el filme el actor portugués Ruy Ruy de Carvalho, la actriz austriaca Anna Tenta y Natalia Risueño, que debuta y hace de la mejor amiga de la protagonista. Para completar el cast y darle más veracidad a la peli, la dire ha contado con actores naturales, personas de la zona que se han puesto delante de las cámaras por primera vez. «Te dan algo muy verdadero que ya lo tienen de base y a la vez les tienes que enseñar a quitarse un poco el miedo a la cámara. A las actrices profesionales como que las envuelve de esa verdad y eso queda muy bonito cuando lo ves en pantalla», considera Gala Gracia.
Así de grande es la longaniza de Graús, comenta Gala Gracia a Anna Tenta y Laia Manzanares. Foto de Lander Larrañaga
El equipo se trasaldó a la Ribagorza para iniciar el rodaje. Una filmación muy internacional, ya que la peli cuenta con producción española, italiana y portuguesa. Fueron seis semanas de invierno en las que visitaron varios municipios del Alto Aragón, como Benabarre, Montañana, Graus o Alguaire. También pasaron por Lérida en Pont de Suert. «Fue un rodaje de mucho frío y muchas heladas, pero con una luz invernal muy bonita«, destaca la directora. «Se ven unos paisajes increíbles y eso nos ayudó a contar esta historia que habla un poquito también sobre la soledad».
La banda sonora está realizada por Filipe Raposo de Lisboa y hace match con las montañas aragonesas. «Es una mezcla de las montañas del Pirineo con el jazz. El compositor nos ha hecho unas canciones muy bellas para la película”, cuenta ilusionada. Parte del equipo aragonés esta compuesto, entre otros, por Arantxa Ezquerro, en vestuario, Juanjo Javierre como supervisor musical y Estela Rasal con Nut Producciones.
VOLVER A LAS RAÍCES
La directora realiza un símil con la protagonista ya que ella también vuelve a Benabarre, su pueblo natal. «Algunos directores noveles tendemos a acercarnos a nuestras raíces. Creo que volver al pueblo donde uno creció para contar una historia, que de alguna manera está vinculada con lo personal, es una experiencia muy bonita. Además, a la gente le hace mucha ilusión que regreses para rodar. Al final lo que sale es su pueblo», indica Gala Gracia.
Al guion le fue concedida una beca de desarrollo de proyectos iberoamericanos del Programa Ibermedia entre 20 proyectos de toda Latinoamérica, España, Portugal e Italia. Un inicio muy guay que le llevó a conocer al principal productor del largometraje Carlo D’Ursi con Potenza Producciones. «Allí conocí al productor de la película y con él empezamos este viaje». Una aventura que continuará en Roma, donde se está finalizando la peli. «Hemos terminado el montaje y en Roma estamos haciendo la posproducción de sonido y la correción de color. En julio iré dos semanas y luego a final de agosto y a principios de octubre para acabar la película». Un sitio ideal en el que completar este sueño y tomarse un helado frente a la Fontana de Trevi.
Gala Gracia y Guillermo Garavito celebrando la escena 1, plano 1 y toma 1 de la película.
En un tiempo atrás no muy concreto, la bruja Atxondite viajó en escoba, más rápido que en los Ouigo, y abandonó Zugarramurdi. Se bajaría en el pueblo que se convertiría en su hogar. Esta leyenda inspiró el nuevo corto de la realizadora Nuria Rubió, ‘Atxondite’, y esta vez no lo hace sola, sino que lo codirige junto a José Manuel Manero.
¿Le pedirán milagros a la actriz, Macarena Gómez? Foto de Yolanda Puga.
Muchas son las historias que hemos oído sobre brujas, pero esta llamó especialmente la atención de la directora. «En el rodaje de mi anterior corto, ‘Vir y Diana’, el alcalde del pueblo me cuenta la leyenda de la bruja Atxondite«. Una bruja que se cansa de hacer caso al demonio y le dice que NO, coge su escoba y se pira. Guiada por la constelación de Escorpio, el Google Maps de la época, llega a un pueblo, construye una cabaña y se queda a vivir en él. Los lugareños, atraídos por la magia de la extraña mujer, acuden a ella para intercambiar favores.
«A mí lo que me atrae sobre todo es la idea de una mujer que dice que no. Dejando de lado la historia de la brujas, la idea de una mujer que dice que no a un hombre, en este caso sería el demonio. Quiere hacer su vida y eso es lo que me gusta», confiesa Nuria Rubió a Secuenciadas. A la protagonista de la historia «no le importa que la llamen bruja, si eso significa ser una mujer libre», explica. La directora, que ha realizado el guion de sus anteriores trabajos, en esta ocasión le cede el testigo a Ignacio Muñoz. «Cuando yo le cuento la leyenda y que me voy a presentar a un concurso de Navarra, le interesa ayudarme».
Presentan el guion a ‘Navarra tierra de cine’, un certamen para promocionar el turismo en Navarra a través de la ficción cinematográfica. Al tiempo, le llaman diciéndole que ha sido una de los 10 seleccionados, lo que implicaba irse a rodar a uno de los pueblos colaboradores. «Yo sinceramente pensé: “en la que me he metido” porque hay muy pocos plazos de tiempo. Tienes un mes para rodar y un mes para montar. Es un poco de locos», considera. Pero a la dire que le va el barro, dijo ¡allá vamos, navarricos!
La directora, de tirantes, acordándose de que solo tiene un mes para montar el cortometraje. Foto de Yolanda Puga.
El rodaje duró dos intensos días, en los que los pronósticos de lluvia hicieron tambalear la producción. Tal vez fue brujería que la tormenta llegara cuando el equipo estaba cenando, otros no tuvieron tanta suerte… ¿Sería algún hechizo protector para salvar rodajes?
LA POCIÓN IMPROVISADA
Necesitaban muchos ingredientes para realizar la poción mágica que les llevaría a competir con el resto de trabajos. María Naharro, es la protagonista, que cámara en mano quiere contar la historia de su madre muerta, una mujer con muchos secretos, e Íñigo Etayo es el hermano pesado que no cree en nada. Cuando la protagonista no encuentra hacia donde ir con el documental que está rodando, aparece una velocipedista, Pepi Labrador, que de manera cómica es perseguida por la hija. La actriz es colaboradora del programa de televisión ‘La resistencia’ y es una divertida monologuista de 60 años.
Las actrices Pepi Labrador y María Naharro, cuando se enteraron de que en el catering solo había espárragos.Foto de Yolanda Puga.
Gracias a la productora del cortometraje, Yolanda Puga, hace una colaboración especial la actriz Macarena Gómez, conocida por su papel en ‘La que se avecina’ o en películas que dan mucho miedito. A través de una misteriosa foto, pone cara a la invisible madre que sobrevuela el filme.
Una parte muy importante que quiere destacar Rubió es la música. «Los compositores también son autores de las obras cinematográficas. Nacho Ugarte me ayudó muchísimo», reconoce. Y es que en la sala de montaje la obra se convirtió en un falso documental y fue algo improvisado . «El compositor me escuchó y me dijo tenemos que arriesgarnos. Déjame y te mando algo». Rubió tuvo la idea posterior de añadir una voz en off que desvelara los pensamientos de la protagonista. «La voz en off es algo como muy odiado pero es que el corto lo pide. Ella está con la cámara, te está contando lo que está descubriendo y a la vez el espectador también está formando parte de ese relato«, explica Nuria Rubió.
¿Quiénes forman parte del aquelarre técnico? En la dirección de fotografía esta Boris Zaparta, en sonido directo Nacho Antoñanzas, vestuario, Paula Ozaez, dirección de arte, María Fernández, maquillaje, Jara Rodríguez, montaje, Yolanda Puga, etalonaje, Hugo Falcón, diseño sonoro, Rafael Fernández y UNIK producción musical y postproducción de sonido, Rafael Toledano, entre otros.
Parte del aquelarre haciendo un Tik Tok. Foto de Yolanda Puga.
El cortometraje, que pudo verse en el pueblo en el que se rodó, Allo (Navarra), ganó un premio de distribución con Movibeta. «Allo era la primera vez que colaboraba y se han quedado muy contentos con el corto», asegura Nuria Rubió. Ahora espera comenzar la distribución de su cuarto trabajo ‘Atxondite’ y que pueda verse y disfrutarse.
El caballo ‘Titán’ da nombre al último cortometraje de María Salgado. Natural de Jaca y afincada en Madrid, la directora dice que con esta historia nos va a pegar «un pelotazo en el estómago; yo cada vez que lo veo me echo a llorar», reconoce la aragonesa. Así de claro habla a Secuenciadas de esta historia tan personal y autobiográfica, que se ha decidido a contar, gracias a un concurso de CIMA, la asociación de mujeres cineastas. «Hacía tiempo que tenía esa idea en la cabeza y lo quería contar. CIMA fue un poquito el empujón para hacerlo». Ganaron el concurso y lo rodaron.
Las protagonistas cuando se enteraron de que no había smartphones en los 80.
Año 1986, la radio suena de fondo, «hoy sabremos qué ciudad será la nueva sede para los juegas olímpicos». Una furgoneta rollo Lost aparece en escena y todo es júbilo y alborozo. Unas niñas bajan de la furgoneta, han llegado a la hípica donde van a pasar un día emocionante. «Al principio todo parece una fiesta. Es una cosa que yo quería recalcar, que todo a tu alrededor es muy feliz y a ti, te está ocurriendo eso«, explica Salgado.
Para escribir la historia tan dura que es ‘Titan’, María Salgado buceó en su subconsciente para intentar recordar aquello que su cerebro le había obligado a olvidar. Una tarea bastante difícil para la coguionista, pero en la que contó con la ayuda de Mercedes Castro, con la que escribe desde hace tiempo. «Yo tenía una serie de elementos que me parecían imprescindibles. El nombre del caballo, porque el que yo montaba se llamaba Titán, y el hecho de hacer sentir a la protagonista alguien especial», desvela. Pasó ese guion a «brochazos» a Castro, quién le dio forma.
Y del divertimento pasamos a otra historia bien distinta que nos hace cambiar el chip. «En el cortometraje pongo a la gente en una situación donde no tienen más remedio que aguantarse y verlo» y es que, como reconoce, estamos acostumbrados a mirar a otro lado y aquí no podemos hacerlo. «Yo con esto solo quiero que se tome conciencia de que esto pasa«, añade Salgado.
Para esta historia potente, necesitaba que el corto estuviera protagonizado por un actor de categoría y que pudiera afrontar este rol. Así que llamó a Roberto Enríquez, que se maneja en este campo de la interpretación. Admira al intérprete desde hace tiempo y, además, ya se conocían porque la dire también ha estudiado la carrera de interpretación. Le respondió que le había encantado el guion y que no tenía ningún problema en hacer a ese personaje, porque «igual que he hecho de nazi, puedo hacer de esto perfectamente», le confesó.
Roberto Enríquez, el hombre que susurraba a los caballos
María Salgado cogió a los niños que aparecen patinando en su anterior corto ‘Loca’ y se los llevó a montar a caballo en esta historia. Entre ellos eligió a Paula Toribio como protagonista, la que monta a Titán. «Entre ellos elegí a Paula porque es una niña muy pura e inocente y sabía que iba a ser fácil con ella. Fue pura intuición», reconoce.
EL PASADO SIEMPRE VUELVE
Volviendo al pasado, como en el corto, la directora con 10 años salió de Jaca y se fue a vivir a Barcelona ¡Menudo cambio! Ahí viviría a tope los Juegos Olímpicos del 92, montaría a Titán cual jineta avanzada y llevaría jerséis de lana muy molones. «Yo quería un jersey verde para la protagonista y no me preguntes por qué, pero lo quería. Y jerséis de ese tipo para todos ellos». Bajo esa premisa, Irene Ortega, en vestuario, tuvo que buscar en wallapop o análogos suéteres de punto con rombos y pantalones de pana. «Van a la hípica, pero no son amazonas. Nosotros llevábamos pantalones de pana, así que pensamos que no era necesario que todos llevaran el traje de equitación».
Portada de Venca de 1986. Moda equitación casual y de regalo un bastón.
Santi García, en el departamento de arte, lo tuvo un poco más fácil gracias a la hípica. «Fue una de esas cosas que te toca la lotería, porque para mí la localización es super importante», cuenta María Salgado. El actor Roberto Enríquez iba bastante y se la recomendó a la directora. «Es una hípica que es moderna, pero todavía conserva una parte más antigua. Me recordó muchísimo a la hípica donde yo iba», recuerda. Por otro lado, sí que tuvieron que trabajar cómo eran las sillas de montar en esa época.
Luego está la furgoneta ochentera, que entra a todo trapo en la hípica y con la que Salgado quiso hacer un guiño. «Le pusimos la matrícula del coche de mis padres, me hacía ilusión y es un detalle que a mí me encanta». Lo único que la verdadera empezaba por HU (Huesca) y aquí, por el lugar en el que sucede, se cambió a B (Barcelona).
Sacando brillo a la furgoneta de un amigo de la directora.
EL RODAJE
En enero de este año se rodó el cortometraje. Todo el equipo se trasladó a Casavieja (Ávila), a una granja escuela en la que tuvieron que hacer noche y donde curiosamente las habitaciones tenían nombre de hadas. «Unrodaje precioso» el que recuerda María Salgado, y en el que se tuvo que sujetar emocionalmente. «La primera secuencia que se grabó fue la más difícil y lo hicimos adrede, para quitarle presión a ella (Paula) y a todos. Para luego ya pasar toda la parte bonita y lúdica».
Con las niñas prefirió no ensayar y que no se aprendieran el texto de memoria y no perder naturalidad. Con Paula Tobirio lo tuvo claro. «Teníamos un peso pesado que era Roberto Enríquez, que yo sabía que la iba a llevar. Le dije a ella que se dejara impregnar por la persona que tenía delante y que obedeciera».
Roberto Enríquez al fondo, María Salgado escuchando Mecano y Mercedes Castro hablando con Paula Toribio del último éxito de Quevedo.
El corto ‘Titán’ está seleccionado en el Festival de Cine de Zaragoza, calificador Goya, y en el Festival de Cine de Fuentes. «Con mi primer cortometraje ‘A Violeta’ (1998) gané en Fuentes y desde entonces tengo un vínculo muy grande» y lleva ya cinco selecciones a los Goya.
Uno de sus próximos proyectos es un largometraje, ‘Frío’, una historia que ha escrito junto a Mercedes Castro, con tintes biográficos de ambas y que «parte de nuestras vivencias familiares, pasando por Galicia, Jaca y Barcelona» nos cuenta. «Estoy un poco cansada de rodar cortos porque al final te arruina muchísimo. Así que estoy con muchas ganas de levantar el largo. Estamos buscando producción, también productora aragonesa y productora gallega». Le deseamos mucha suerte con este nuevo proyecto y aplaudimos su gran valentía al contar la historia de ‘Titán’.