Un repartidor en apuros

Un repartidor en apuros

Tiempo de lectura: 6 minutos

¿Cuál es la peor pesadilla de un repartidor? ¿Realizar la entrega tarde? ¿No llegar? ¿Que te roben la bici, la moto o la furgo? Seguramente todas ellas, pero también la posibilidad de que tu bici siga en su sitio, pero se haya quedado atrapada y no puedas continuar trabajando. Este es el punto de partida del cortometraje ‘La bici’, el estreno detrás de las cámaras, como guionista y también productor, del zaragozano Antonio Oliete, que en su primer corto decide poner en aprietos a un joven repartidor que padecerá varias peripecias intentando liberar su bicicleta en pleno barrio de la Magdalena en Zaragoza. 

El dire, Antonio Oliete, muy concentrado mirando la acción en la pantalla mientras piensa cómo putear más a su prota (Foto Marcos Cebrián)

Oliete, afincado en Barcelona, se atreve por primera vez con la dirección en este audiovisual después de realizar un curso de escritura de cortometrajes. “Me apunté por mi trabajo entonces, relacionado con la distribución y venta cinematográfica, para aprender a valorar mejor los guiones, aunque ya me había picado el gusanillo antes”, explica a Secuenciadas. 

Aunque tenía distintas ideas para escribir su guión, ninguna llegaba a cuajar hasta que un día fue en bici al gimnasio en Barcelona y, al dejarla en el aparcabicis, pasó la cadena también por el cuadro de la bici de al lado. “Poco faltó para cerrar la cadena, me di cuenta y se me encendió la bombilla, pensé que la podía haber liado un montón y que sería una faena para el dueño de esa bici”, recuerda. 

¿Quién podría acabar más puteado si le ocurriera esto? Pues blanco y en botella sobre ruedas: un repartidor. De este modo, la historia trata de un repartidor que va a buscar su bici y la encuentra atrapada junto a otra, no la puede sacar y “a partir de ahí suceden una serie de peripecias en las que trata de recuperarla”. Primero, llamando a su casa, pidiendo a su hermano unas cizallas, acudiendo a la ferretería y una sucesión de ideas locas para intentar liberar a su bien más preciado. Pobre hombre, no tiene bastante con aguantar todos nuestros pedidos y lo dejas sin su elemento básico de trabajo. Vaya tela, Antonio.  

¡Prevenidos! Parte del equipo rodando una escena en un portal ‘magdalenero’ (Foto Marcos Cebrián)

Al principio, el dire escribió el guión, pero “no lo había concebido como algo que rodar, aunque a medida que avanzaba me di cuenta de que lo imaginaba con ritmo, con música, y un amigo me dijo que acabaría rondando algo antes o después, algo que no se me había pasado por la cabeza jamás”, asegura. Gracias a su colega se lo planteó y apostó por dar a su primer trabajo calidad cinematográfica, por lo que fue contactando con distintos profesionales hasta conformar todo el equipo.  

MUCHAS HORAS Y ENERGÍA 

El corto tiene toques de comedia y mucho de thriller y de acción. Ya nos imaginamos a nuestro sufrido repartidor corriendo como si no hubiera un mañana, siguiendo el ejemplo de Forrest Gump, para intentar recuperar su tesoro. También el director ha tenido que esforzarse al máximo porque, como él mismo reconoce, crear un corto es “un currazo, lleva muchas horas y energía” y más aún cuando se asume también la labor de guionista y productor. 

“No quería depender de nadie, me lo quería pagar yo y hacerlo yo”, detalla, para observar que cuando el presupuesto comenzó a aumentar “ya era tarde”. Así que con fondos propios y de sus amigos ha logrado rodar el trabajo y “ha sido muy guay no depender de nadie, ha surgido todo de manera muy natural”. Con el equipo casi formado antes de la pandemia, ya que el ayudante de dirección se sumó a ‘La bici’ tres días antes del inicio del rodaje, decidieron grabar en septiembre y en los meses pandémicos acudieron a localizar por la ciudad. 

El prota, Manuel Egozkue, corriendo como si no hubiera un mañana. Esperamos que con la mochila vacía (Foto: Marcos Cebrián)

La acción transcurre en la Magdalena, en el cruce de las calles Estudios y Cortesías, en un aparcabicis donde rodaron tres escenas; también en la Taberna Urbana, que tantas buenas tardes y noches nos ha dado; en las calles detrás del Mercado de San Vicente de Paúl; junto a la Iglesia de la Magdalena; en interiores y, por último, también en la margen derecha del río, aunque “ha sido todo bastante Magdalenero”, bromea el dire, para reconocer que, como director novel, “me dejé un poco demasiada energía en hacer y rehacer cosas, por eso de ser la primera vez, pero lo hice todo con mucha ilusión y muchas ganas”. 

Circunstancias familiares le llevaron a pensar este corto para su grabación en Zaragoza y a elegir este barrio popular para enseñar “esa Zaragoza más canalla, más vanguardista y alternativa, más parecida a otras ciudades como el Raval de Barcelona”. 

TRES DÍAS DE SEPTIEMBRE 

Fueron tres días de rodaje del pasado mes de septiembre y, como en tantos otros proyectos, la pandemia estuvo a punto de cancelar todo el proyecto, pero el equipo decidió continuar y pensó: “o nos chapan el chiringuito o no paramos”. “Siempre hemos sido prudentes en los pagos por si luego no podíamos rodar, pero todo siguió su curso aunque la amenaza estuvo ahí unos cuantos días”. Para el rodaje decidieron alquilar el equipo y utilizaron una cámara Red Gemini

Como actor protagonista absoluto encontramos a nuestro repartidor favorito Manuel Egozkue; José Luis Esteban hace las veces de sufrido padre; Alma Oliete aparece como motera; Ángel Gotor, como novio motero; Jorge Asín tiene una aparición estelar como camarero; Álvaro de Paz es músico; y desfilan ante la pantalla en la ribera Celia Sanlázaro, Carolina Camara y Lorena Torrijo; mientras que escucharemos las voces de Gonzalo Canalejo, Mikel Cormantoral y Aimar Flordelís.  

En el equipo técnico tenemos a Carlos Martín como ayudante de dirección; Lara Meléndez, como script; Marcos Cebrián, productor asociado y foto fija; Claudia Andrés, como directora de producción; Inés Bielsa, en las labores de auxiliar de producción Claudia Salcedo, como productora ejecutiva. Nacho García es el DOP; Sandra Gómez, ayudante de cámara y foquista; Cristina Gómez, auxiliar de cámara; Manu Buil y Luis Cuartero, eléctricos; Albano Sánchez, steadycam; Rafael Toledano, como jefe de sonido directo; Almudena Gotor, directora de arte y vestuario; Macarena Buena, ayudante de arte; mientras que en postproducción, Río Bravo Cinema Studio se está encargando del montaje y Veni Studio de los VFX. 

Tras el rodaje, el corto está en fase de montaje, efectos, etalonaje y sonido. “No he pensado en fecha de estreno”, afirma el director, para reconocer que le gustaría tenerlo acabado a principios de año, pero por disponibilidad de todo el equipo “estará en no menos de dos meses”. 

Manuel haciendo como que escucha a Antonio mientras canta mentalmente a lo Manolo Escobar: ¿Dónde estará mi bici, dónde estará mi bici? El dire le indica en un plano el punto exacto donde la aparcó para que no se vuelva a olvidar (Fotos Marcos Cebrián)

EL DESPERTAR 

Este proyecto “ha despertado mi vena creativa o narrativa, que he tenido apagada muchos años, pero que estaba ahí”, manifiesta Oliete, para indicar que tiene nuevas ideas en mente, aunque aún no se ha sentado a escribirlas. “De crío me gustaban mucho las redacciones, escribir e inventarme historias, y dibujar y al dirigir una peli se juntan las dos cosas, inventar una historia y ponerla en imágenes”, subraya. 

Antonio Oliete estudió LADE (Administración y Dirección de Empresas) en la Universidad de Zaragoza, cursó un máster en Marketing, Distribución y Venta Cinematográficas en la Escuela Superior de Cine y Audiovisual de Cataluña (ESCAC) en 2009 y ha sido jefe de ventas en la agencia Film Factory Entertainment hasta el pasado año. Asimismo, ha realizado varios cursos de guión y producción que le han llevado al rodaje de ‘La bici’ y está cursando un máster de dirección en la ESCAC

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Una superproducción a nivel aragonés

Una superproducción a nivel aragonés

Tiempo de lectura: 7 minutos

Leo Dolgan y Daniel Vergara son dos técnicos aragoneses que se han atrevido con la producción ejecutiva de su primera película ‘Armugán’. Una peli del catalán Jo Sol, rodada en Aragón y que en su primer paso por un festival ya ha ganado dos grandes premios.

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Íñigo Martínez y Gonzalo Cunill, protagonistas de ‘Armugán’, soñando con los paisajes de Aragón.

Un peliculón rodado en paisajes aragoneses es lo que debió pensar Jo Sol viendo las maravillosas localizaciones que existen en nuestra tierra. Le enseñó un guion a Leo Dolgan, que ya barruntaba fundar su propia productora junto a Vergara, y así se lanzaron a crear La Bendita Produce. «Cuando apareció este proyecto creímos que era el adecuado para tirarnos a la piscina, dejar nuestro lado de confort como técnicos y lanzarnos a la producción ejecutiva», cuenta Daniel Vergara a Secuenciadas. » La productora está en Huesca, es oscense, pero nosotros vivimos y nos ganamos la vida en Barcelona porque en Aragón es complicado ganarse la vida en el audiovisual«, explica Dolgan; «de momento», le apostilla Vergara.

Y seis meses después estaban rodando en lo alto de una montaña del Sobrarbe la película aragonesa ‘Armugán’ que narra la historia de un acabador, alguien que ayuda a las personas que lo necesitan a morir. Como una subcontrata de La Muerte, en cuerpo carnal y aquí entre nosotros. Una historia con un pintón tremendo como punto de partida y que ya tenemos ganas de ver.

En un remoto valle del Pirineo aragonés se cuenta la leyenda de Armugán. Se dice que se dedica a un oficio misterioso y terrible del que nadie quiere hablarAquí, dos personajes se enfrentan con formas distintas de ver la vida, Armugán, interpretado por Íñigo Martínez, y Anchel, al que da vida Gonzalo Cunill.

Armugán contándole un chiste a Anchel, que no lo pilla, en un momento de la película.

FABLA ARAGONESA EN BLANCO Y NEGRO

La película luce en blanco y negro y charran aragonés y les hemos preguntado a los productores ejecutivos el por qué de esta locura. «El director quería rodar en blanco y negro porque es una peli transhistórica, que a pesar de que ocurra en la época actual es una historia que perfectamente podría ocurrir hace 100 años o dentro de 50 y en cualquier parte del mundo», explica Vergara.

El aragonés no es para tanto, según Dolgan. «Tiene unos diálogos en aragonés del personaje principal, el acabador, porque es una figura que vive muy aislada, en el alto de las montañas y hablar en aragonés forma parte de las características del personaje» y es que no lo hablan todos los personajes. Han querido normalizar el uso de la lengua allí donde ocurre la historia.

PLURIEMPLEADOS

Como os contábamos anteriormente, Daniel y Leo son técnicos del audiovisual y en la película trabajan también como director de fotografía y sonido, respectivamente. Un pluriempleo en toda regla para exprimir su talento.

A pesar de ser una película en blanco y negro y del tema que trata, Daniel Vergara, director de fotografía del largometraje, en términos visuales la considera muy luminosa. «Rodar en blanco y negro puede parecer más sencillo, pero lograr que tu película sea visualmente brillante, conseguir que aunque hable sobre la muerte no quede oscura ni tenebrosa es muy difícil y en la película esto está conseguido», considera, y recalca que esto también es obra de la dirección de arte, el vestuario y de todos los lugares preciosos que han localizado para rodar: «eso es muy fácil en el Pirineo aragonés», añade Dolgan.

Una cámara red escarlet 5K y unas antiguas ópticas soviéticas encuadran en la zona del Sobrarbe, Boltaña, Cañón de Añisclo, Guaso, Ascaso, Murillo de Gállego, Zaragoza y Belchite, entre otros. Sin embargo, para Vergara hay otros factores. «En el 2021 que vamos a estar llega un punto en el que cualquier cámara tiene una capacidad de grabación increíble ya. La cámara no es lo que diferencia la estética visual de la película, hay otros factores como la luz o los apartados técnicos, mucho más determinantes que una lente», opina el DOP, ganador del premio Simón a mejor fotografía en 2018.

Daniel Vergara descansando en un momento del rodaje con su inseparable amiga Escarlata. Foto de Daniel Martínez.

Por su parte, Leo Dolgan se ha encargado de otro pilar fundamental en un audiovisual: el sonido. «La película tiene mucho espacio de silencio y eso hace que cada sonido tenga que estar muy bien integrado para que te lo creas, te emocione y para que funcione con la historia». El diseño de sonido lo define como muy minimalista, vamos que hay sonidos sin que tú te des cuenta.

Alfonso Castellanos y Leo Dolgan, a la derecha, pidiendo silencio en un momento del rodaje de ‘Armugán’. Quiere que todos escuchen sus sonidos, que para eso se los ha currado. Foto de Daniel Martínez.

RODAJE SURCANDO LAS MONTAÑAS

Estuvieron rodando cinco semanas entre septiembre y octubre de 2019 y para Daniel Vergara fue un rodaje soñado. «Fue increíblemente fácil porque en la zona en la que estábamos rodando toda la gente se volcó con nosotros, nos ayudaron muchísimo y nos ofrecieron un montón de recursos. Además trabajamos con un equipo muy joven aragonés y eso hizo que hubiera una consonancia muy buena y la gente estaba muy motivada y muy con la película».

«Lo que dice Daniel es muy importante porque sin la implicación de la gente del lugar de la comarca, de Boltaña, y un equipo tan motivado y tan profesional hubiese sido un rodaje complicado porque era duro en términos físicos y de localizaciones«, apostilla Dolgan.

El director Jo Sol, in the middle, admirando las montañas aragonesas; Daniel Vegara, hincando rodilla, graba a Íñigo Martínez. Foto de Daniel Martínez.

MÁS ARAGONESES ILUSTRES

El músico oscense Juanjo Javierre se ha encargado de la banda sonora. Ha trabajado principalmente con instrumentos de viento, inspirados en la zona del Sobrarbe y es que, curiosamente, su familia también era de la zona y gracias a ello ha creado un vínculo importante entre él y la historia de la película. Con un hueso de buitre, Javierre y un luthier construyeron una flauta que el prota toca con un sonido muy místico y muy espiritual. «Esta flauta crea el leimotiv que acompaña a toda la película y es preciosa», afirman con orgullo.

Más aragoneses que han formado parte de este proyecto: María Jiménez, en la dirección de producción; Jesús Bosque, como asistente de producción, que se apunta a todos los bombardeos oscenses desde el pleistoceno; o Cristian Diamante «Deru» en la dirección de arte, pero nuestros productores recalcan que casi todo el equipo es aragonés.

El personaje de Anchel esperando a la muerte, mientras Julia Sopesens, de vestuario, sostiene un extraño aro. Foto de Daniel Martínez.

EL CAMINO DE ARMUGÁN

Ahora el equipo acaba de iniciar un recorrido de festivales internacionales que durará dieciocho meses y que comenzó el 23 de noviembre en el 24º Tallinn Black Nights Film Festival. Acudieron a presentar la peli el director Jo Sol y Daniel Vergara que recuerda: «nos íbamos el día 26, pero el 25 nos pidieron que nos quedáramos porque la peli había sido premiada con el premio Ecuménico y el de mejor banda sonora del jurado«. ¡Pero qué maravilloso comienzo!

«La reacción del público fue espléndida, a todo el mundo le llegó la peli», rememora Daniel Vergara. «La película ha conseguido algo increíble, juntar a gente y dar la mano. Hemos conseguido que a la gente que está a favor o en contra de la eutanasia les guste y que al propio episcopal y a los curas les encante las película, que es algo inaudito», descubre Dolgan.

Esperan poder estrenar en salas comerciales a finales de verano del año próximo y programar un merecido estreno en Boltaña. Estamos seguras de que próximamente podremos disfrutar de este largometraje en algún festival del mapa español y mientras tanto os dejamos el tráiler de esta original historia.

Las ovejas son también protagonistas de esta película. ¿Ayudarán en su tarea a Armugán?

PRÓXIMOS PROYECTOS

El maño Daniel Vergara se formó en la Universidad San Jorge y a partir de allí empezó a interesarse por el medio y buscarse su hueco con proyectos tan premiados como los cortometrajes ‘Los hombres de verdad no lloran’ (2017) y ‘El color de la sed’ (2017), donde conoció a su socio, o la docuficción ‘Marcelino, el mejor payaso del mundo’ (2019).

El oscense Leo Dolgan estudió en la Escuela de Cine de Cuba. Su carrera como sonidista le ha llevado por decenas de países incluyendo numerosos títulos para cine entre los que destacan el rodaje subacuático ’47 meters down’ o el documental ‘Island of the hungry ghost’ por el que ganó el premio a mejor sonido en los premios del cine independiente australiano 2019.

Juntos han trabajado en el cortometraje ‘Vera’, de Laura Rubirola, con el que ganaron premios a mejor foto y sonido en el Festival Nacional de Cortometrajes de Talavera de la Reina y además esta preseleccionado como candidato a los Goya. Acaban de rodar el próximo corto de Gala Gracia, ‘La pared’ , y con La Bendita Produce están en fase de desarrollo de un largometraje documental de ficción que esperan rodar al año que viene.

PRODUCTOR EJECUTIVO

Siguiendo el espíritu de Secuenciadas de ser una web didáctica a nivel terminología o diccionario audiovisual, os vamos a explicar qué significa este palabro. El productor ejecutivo busca la financiación, la administra y la gasta.

«Desde que nos llega el guion, decidir si lo levantamos, luego conseguimos la financiación, ejecutamos ese presupuesto de una forma concreta, terminamos la película, estrenamos y distribuimos la peli», detalla Daniel Vergara.

«Somos los empresarios, vimos la oportunidad de hacer el proyecto y nos la jugamos a sacarlo adelante y finalizarlo, con todo lo que ello conlleva, sobre todo en términos de riesgos empresariales», manifiesta Leo Dolgan.Bravo por vosotros, ¡el mundo es para los valientes!

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