Enlos años 80, además de estar de moda los calentadores, las hombreras y las melenas con volumen, se inauguró la central térmica de Andorra (Teruel). Esta industria utilizaba el carbón como combustible y hacía que llegara la electricidad a nuestros hogares para poner el radiocasete a todo volumen. Un pasado que la directora Ana Asión ha querido reflejar en su nuevo trabajo, el documental ‘Luz de gas’.
Las energías renovables, los antagonistas en esta historia de las carboeléctricas
Sus compis fueron los motores para llevar a cabo este trabajo. «A raíz del cierre de la central térmica de Andorra, con un grupo de compañeras del departamento de Historia del Arte decidimos que había que recoger la importancia de la industria energética en Andorra y en toda la comarca», explica Asión a Secuenciadas. La dire, que trabaja como profesora en la Universidad de Zaragoza, quería mostrar todo el patrimonio industrial que se iba a perder.
«Que desaparezcan este tipo de construcciones hace que también, de alguna manera, desaparezca parte de nosotros. Me interesan mucho las historias que hay detrás, las que suponen toda la construcción en sí y el vacío que dejan de cara al futuro», señala. En esta historia se ha dejado un trozo de corazoncito, ya que ella es de la zona, vecina de La Puebla de Hijar. Además, su padre estuvo trabajando en la mina a cielo abierto de Ariño. Un plus sentimental y emocional para este trabajo.
Ana Asión entrevistando a la inciativa Dharma de Andorra
Aparecen 12 testimonios desde puntos de vista muy diferentes, ecologistas, defensores del patrimonio, antiguos trabajadores, hasta hace aparición estelar la propia Endesa, la dire no se ha dejado a nadie en el tintero. «Quería diferentes miradas para ver todo lo que ha sucedido en los últimos tiempos. Esta desaparición, esta luz de gas desde ciertos sectores que también se está haciendo con todo lo que ha pasado en el territorio». En el audiovisual aragonés viajamos, asimismo, a Ariño y a Escatrón, dos pueblos que también tienen algo que contar sobre este tema.
Antes todo esto era campo. Oh, wait!
CATAPUM CHIM PUM
Uno de los momentazos que recoge este trabajo es el derribo de las tres torres de refrigeración de la central térmica de Andorra (en mayo de 2022), una imagen que se hizo viral en redes y que la propia realizadora vivió en directo. «Fue una sensación muy extraña. En el punto en el que estábamos había parte del equipo del derribo y lo celebraban. Fue raro porque en realidad no había nada que celebrar, desde mi punto de vista», recuerda. «Además fue todo muy rápido. Ya se pudo ver que lo que fue el derribo, fue segundos. Una sensación de tristeza y ya con la chimenea (derribada el pasado 16 de febrero) ha sido el punto final».
Minutos antes de decir adiós a las torres de refrigeración de Andorra
Tras 40 años de historia, la chimenea se convirtió en escombros en cuestión de segundos. Una infraestructura que era considerada la tercera más alta de España y, como curiosidad, más que la Torre Eiffel de Paris. «Creo que es muy importante que estas cosas no se olviden. Precisamente cuando hacemos un documental es para eso, para documentar algo que ha pasado que queremos que quede en nuestra memoria y en nuestro legado», remarca la directora.
Además de la reivindicación patrimonial, a Ana Asión ‘Luz de gas’ le ha servido para acercarse a todo lo que había estado escuchando durante muchísimos años desde que era pequeña, el trabajo en la mina. Un diario de testimonios que desea que pueda verse en muchos sitios. Para que la gente «entienda un poco mejor todo lo que ha sido el cierre de las minas y el cierre de la central térmica y el vacío que dejan. Han sido muchos años en los que habido mucha gente que de manera directa o indirecta han vivido de todo esto».
Es una producción de Cosmos Fan, Gabi Orte en dirección de foto y edición y Carlos Laforga como ayudante de producción.
“El cine tiene que ser dos cosas: primero, que no sea aburrido y segundo, que sea divertido”. Esta frase del Simón de Honor 2021, el cineasta Pedro Aguaviva, encarna a la perfección al mundo del audiovisual y la décima gala de los premios Simón, que la Academia del Cine Aragonés celebró el sábado, 26 de junio, en la localidad turolense de Andorra.
El premio Simón en manos de uno de los premiados de la noche. ¿Quién será?… Foto: Josian Pastor
Pero, ¿cómo podríamos describir mejor lo que ocurrió antes y durante la ceremonia? El encargado de hacerlo, en su intervención en la gala, fue el propio alcalde de Andorra, Antonio Amador, quien poco antes de entregar el galardón a la mejor película aragonesa del año aseguró que el cine había hecho todo un homenaje al pueblo ese día al ofrecerle una muestra “de todos los géneros posibles”.
Sábado 26 de junio. Lugar previsto de celebración de la gala: exteriores de la Ermita de San Macario. Comienza a llover, y con ganas además. La previsión es que pare, pero aquello arrecia y convierte “la típica película de ilusión, familiar, de qué chulo ha quedado” todo el escenario de la gala montado, en un “thriller, pero de los chungos”. Seguía lloviendo y la cosa adquiría tintes de drama, pero la Academia no iba a dejar que cuatro gotas, rayos, truenos y algo de barro arruinaran la fiesta del cine aragonés.
Así que lo que habían preparado durante meses para su desarrollo en la ermita, se organizó de nuevo en unas horas en la Casa de Cultura, un espacio de dimensiones mucho más reducidas, pero que permitió ese final feliz que tanto nos gusta en las pelis. “No ha sido en el sitio que se pensaba, pero ha quedado apañadico”, subrayó el alcalde, y tenemos que darle la razón, porque en un tiempo récord se levantó una gala igualmente emotiva y espectacular.
Al ritmo del agente 007 salió al escenario el presidente de la ACA, Jesús Marco, quien aseguró que jamás olvidará a San Macario y la animada tarde que les había dado. Reivindicó la labor de la Academia en Aragón y pidió a las instituciones que crean en estos profesionales, para dar paso a la embajadora de los Simón 2021, la actriz Miriam Díaz Aroca, que llegó bailando y haciendo bailar al presi.
Miriam Díaz Aroca, divertidísima durante toda la gala, se parte la caja con estos premios aragoneses. Foto Josian Pastor
VALIENTES
“Somos una raza de valientes, gente resolutiva, siempre con alegría”, manifestó la artista sobre los profesionales del sector, defendiendo que el mejor premio “es seguir trabajando y que seamos visibles a pesar de la edad”. “Los cincuenter y sesenter tenemos un potencial maravilloso que dar en el cine; los veteranos tenemos tanto que decir y una vivencia inmensa para dar vida a personajes maravillosos”, remarcó. Elogió también la capacidad de la Academia aragonesa para reorganizar la ceremonia, observando que “si esto pasa en Hollywood o en los Goya, aplazan la gala”, y abandonó el escenario de nuevo bailando, reconociendo estar “feliz” por ser embajadora del evento y por representar “una profesión que es maravillosa, a pesar de la incertidumbre».
La presentado, Ana Roche, animó la gala con sus intervenciones entre premio y premio, con guion de Roberto Malo y Daniel Tejero. Foto Josian Pastor
Entre los momentazos de la gala, además de la gran labor de la presentadora, la actriz Ana Roche, hubo apariciones estelares, como las de las actrices María José Moreno y Luisa Gavasa, divertidísimas sobre el escenario. Ambas recordaron a quienes no habían podido asistir al evento por los cambios de última hora causados por el tiempo, y que obligaron a reducir aforos, y felicitaron a la ACA por su capacidad de respuesta. Presentaron el premio a mejor dirección y aprovecharon la ocasión para bromear porque “¿qué pasa si no entiendes al director, si no sabes lo que te quiere decir o eres un error de casting?”, planteó entre risas María José Moreno.
La actriz María José Moreno atendiendo la charrada de su compi Luisa Gavasa.Foto Josian Pastor
Igual de enérgico y eufórico se mostró el actor y productor Jaime García Machín, que recogió el premio a mejor cortometraje para ‘En racha’, de Ignacio Estaregui, y el de mejor actor, para su compañero Saúl Blasco, por este mismo trabajo. Muy emocionada logró Andrea Fandos su Simón a mejor actriz por ‘Las niñas’, dedicando el premio a la directora Pilar Palomero, a sus compañeras de reparto y a su familia; mismas sensaciones que tuvo Germán Roda, director de ‘Marcelino, el mejor payaso del mundo’, docu con el que ganó tres galardones que quiso dedicar al productor, y su amigo, Jaime Fontán, recientemente fallecido, y a su hermana y compañera de oficio, Patricia.
Nosotras le daríamos el premio a mejor discurso a la actriz polifacética Ana Esteban, voz en off de la gala y que se marcó un speech digno de Pedro Almodóvar en los Oscars al recoger su Simón a mejor dirección de producción por ‘La mujer que soñaba con números’, de Mirella R. Abrisqueta. Ana, emocionada, ¡no se dejó a nadie en los agradecimientos! Y mención especial, también, para el equipo del corto ‘Souvenir’, animando la gala con sus vítores y su alegría.
Ana Esteban, ganadora de la mejor dirección de producción, viniéndose muy arriba con el Simón en la mano. ¡Viva el rock and roll! Foto Josian Pastor
‘LAS NIÑAS’ Y SUS SIMONES
‘Las niñas’ fueron las grandes triunfadoras de la noche, con seis ‘Simones’ y su directora, Pilar Palomero, no dejó pasar la oportunidad de agradecer a sus padres el apoyo que siempre le han dado en “esta aventura de hacer cine”. “Mi padre es ingeniero agrónomo, mi madre venía de la física, profesora de matemáticas, y el cine me quedaba muy lejos”, pero en su camino se cruzó también el cineasta Bigas Luna, “por quien seguramente terminé haciendo cine y que nos inició y marcó (con el taller que el director impartía) a muchos de los que estamos aquí”, indicó.
Afirmó sentirse “muy feliz” de haber podido crear una película en Aragón, en Zaragoza, con la mayor parte del equipo de esta tierra y mencionó a todo el equipo y las personas que ayudaron en el rodaje.
La productora, Valérie Delpierre (Inicia Films), que la acompañó para recoger el galardón a mejor película, recordó también al productor de Aragón TV, Jaime Fontán, y el apoyo que prestaron a este proyecto instituciones como la Film Commission o el Ayuntamiento de Zaragoza, “que nos abrió las puertas y las calles”, los zaragozanos y las personas que se presentaron al casting. “Encontramos perlas, pero hay una cantera de actores y actrices maravillosos en Aragón”, dijo.
Valérie Delpierre y Pilar Palomero, recogiendo el Simón a mejor largometraje por ‘Las niñas’. ¡Ya han perdido la cuenta de los premios que llevan!Foto Josian Pastor
Los tambores de los nueve pueblos que conforman la Ruta del Tambor y el Bombo del Bajo Aragón resonaron en la sala para recordar en el homenaje in memoriam al compositor Antón García Abril y al productor Jaime Fontán, fallecidos este año.
Y en esta gala, llena de emociones, el Simón de Honor 2021, Pedro Aguaviva, expresó su agradecimiento a la Academia a través de un videomensaje en el que manifestó que recibir este reconocimiento es “una de las cosas más estimulantes que me pueden suceder en la vida”. El cine es un trabajo que apasiona, “nuestra vida es un arrebato creador y eso no tiene precio”, indicó, asegurando: “yo no me retiraré de la vida nunca, aquí hemos venido a hacer cosas y hay que morir con las botas puestas”.
La Ruta del Tambor y el Bombo del Bajo Aragón hizo aparición al final de la gala, emocionando al público con sus golpes y resonando en Andorra entera. Foto Josian Pastor
PALMARÉS
La décima edición de los Simón fue una gala de matrícula de honor, de lucha contra los elementos para celebrar un año más con el sector el momento que vive el cine aragonés. Y, como en todas las ceremonias de premios, aquí vamos con el palmarés de 2021:
‘Las niñas’de Pilar Palomero – Seis premios ⭐⭐⭐⭐⭐⭐
Mejor Largometraje Mejor Dirección a Pilar Palomero Mejor Actriz a Andrea Fandos Mejor Guion a Pilar Palomero Mejor Banda Sonora Original a Carlos Naya Mejor Vestuario a Arantxa Ezquerro